Mapa de densidad COVID-19 de la UJI
Para garantizar el cumplimiento de las medidas de seguridad como el distanciamiento social, la Universitat Jaume I (UJI) ha implantado un sistema de control de aforos a través de un mapa de densidad para detectar las zonas con mayor concentración de personas a partir de las conexiones a la red Wifi. La herramienta para uso interno prevé mayor implantación durante el plan de retorno a la actividad presencial durante el curso que viene.

Para mantener a raya al coronavirus, la UJI ha implantado un software para controlar las aglomeraciones en el campus, ya contemplado en el Plan de retorno a la actividad presencial del año pasado sobre soluciones tecnológicas para controlar aforos. La herramienta desarrollada por Cuatroochenta, consiste en un mapa de densidad que, a partir de información real sobre el número de accesos a los puntos wifi geolocalizados, muestra de forma visual y por colores el aforo de los diferentes puntos de la universidad accediendo a través de una página web donde se despliega un mapa del campus castellonense.
Esta estimación de la afluencia se mide a través de las conexiones diarias a la red Wifi de la UJI. De media, los días laborables acceden unos 7.000 y los sábados entre 1.000 y 2.000 usuarios al día. Gracias a la configuración sobre intensidad en el mapa se puede obtener información visual de los valores de tránsito en el campus, ya que el mapa colorea las zonas con afluencia entre verde-amarillo-naraja o rojo, dependiendo de la intensidad.
El objetivo principal de la herramienta es advertir al personal interno (como el equipo de dirección, equipo decanal, servicio de seguridad, etc.) de situaciones que aumenten el riesgo de no respetar la distancia social y evitar contagios de COVID-19 en la UJI. Con el mapa de densidad, se obtiene información del aforo en tiempo real y, en caso de ser necesario, permite poder tomar medidas de seguridad para evitar aglomeraciones de personas en un mismo lugar y facilitar esa información a la empresa de limpieza para que pueda hacer una planificación efectiva e intensificar la desinfección en las zonas de mayor ocupación.
Durante el curso 2021–2022, se espera un mayor uso de la herramienta debido al aumento de la presencialidad ya que actualmente se ha optado por un régimen de semipresencialidad y por el momento la necesidad de controlar aglomeraciones ha sido reducida.